Esta especialidad, es uno de los servicios dentales que se preocupa de mantener la boca y sus anexos (dientes, encías y otros tejidos blandos, como mejillas o labios) en buenas condiciones físicas y fisiológicas.
Efectúa tratamientos de caries e higiene, eliminando el sarro o tártaro de los dientes y haciendo restauraciones y obturaciones, con objeto de conservar la estética y la funcionalidad de la pieza dental afectada.
El Odontólogo a cargo reconoce las patologías presentes en el paciente y deriva a los especialistas para evitar o prevenir daños mayores.